Con muchas de las fotografías de Frida la vemos visitando su estado emocional durante varios eventos traumáticos en su vida.
Su mayor influencia para su arte debe ser su relación y matrimonio con su esposo artista Diego, ya que la mayoría de los eventos giran en torno a su vida en común. Ella está sin emociones pero con lágrimas en la mejilla en el centro de la imagen con un pie en la playa y el otro en el mar.
El fondo es un skyscape con nubes oscuras. Ella está de pie con los brazos incorpóreos y colocados en su uniforme escolar y su amado traje de tehuana recuerdos de tiempos mejores, que se ven a ambos lados de ella colgando y conectados a ella por cuerdas.
Hay una vara con un cupido en los extremos que pasa a través de un agujero donde su corazón debería ser como un balancín mientras su corazón oscila entre buenos y malos tiempos. Su corazón se muestra en forma ampliada en primer plano, con un chorro de sangre que se extiende desde el fondo hasta su pie que está en el agua, es este hecho el mensaje principal que nos dice esta imagen y de ahí el subtítulo de la imagen.
El pie que está en el mar tiene la leve apariencia de un velero con el que está expresando un deseo o un pensamiento de navegar lejos de toda la miseria. A esta sugerencia se suma la prueba de la sangre de su corazón que conduce al barco.
En esta imagen vemos su angustia y su sentimiento de desesperanza tras el romance que su esposo Diego tuvo con su hermana Christina varios años antes.
El título the memory es indicativo de la yuxtaposición de elementos dentro de la imagen que se refieren tanto a sus momentos felices como infelices. Este trabajo usó pintura al óleo sobre una placa de metal, aunque esto puede sonar inusual, este medio fue utilizado por Frida en muchas ocasiones e históricamente fue popular entre los artistas mexicanos.
Frida regaló la obra de arte a la galería Renou Cole y se vendió en 1992 por $ 935,00 y ahora se exhibe en la colección Michel Petitjean en París.